La naturaleza no solo es el ver paisajes, sino también el poder aprovechar todos los beneficios que tiene, ya que todos los seres humanos tenemos una conexión neurobiológica con la naturaleza. Estar en contacto con ella nos proporciona bienestar físico y mental.
Según la OMS, los espacios verdes son un recurso indispensable para poder tener una buena salud. Varios estudios indican y demuestran que hacer actividades al aire libre ayuda a reducir el riesgo de sufrir alergias, diabetes, enfermedades cardiovasculares entre otras.
Estar en contacto con ella tiene un efecto terapéutico que nos ayuda a recargar energía y bajar el estrés, por lo que es el mejor remedio para ordenar nuestros pensamientos y recuperar nuestro equilibrio.
Estos son algunos de los beneficios que nos brinda la naturaleza:
- Reduce el estrés: esta nos ayuda a desconectarnos y a reducir el cansancio mental, además de darnos una sensación de libertad.
- Aumenta la concentración: al estar relajado, nuestro cerebro logra enfocarse en las tareas que vamos realizando.
- Estimula la creatividad: La energía que obtenemos de la naturaleza, estimula nuestras neuronas y esto favorece nuestro desarrollo cognitivo y aprendizaje.
- Refuerza el sistema inmunológico: Está comprobado que el estar en la naturaleza nos protege contra diversas enfermedades en general.
- Aumenta nuestra autoestima: Hacer actividad física al aire libre por lo menos 30 min al día, mejora el estado de ánimo y la autoestima, aumenta el rendimiento y a potenciar el control de la disciplina y los impulsos propios.
- Ayuda a escucharnos a nosotros mismos: Los colores y sonidos de la naturaleza estimulan la abstracción y facilitan la meditación.
Si a estos efectos le agregamos la exposición al sol ayuda a sintetizar la vitamina D y ésta a fijar el calcio en los huesos.
Es increíble ver cómo la naturaleza se hace vital en el cuidado de nuestra salud y lo conectado que estamos con ellas.